A lo largo de las entrevistas y artículos sobre documentación que existen en el blog, no existe ninguna relacionado con el mundo de la radio. Y ya era hora de que un especialista nos explicara cómo es el trabajo de servir información a los periodistas que nos hablan a través de las ondas. Por eso hoy entrevisto a Ana Martínez Concejo, documentalista en la Cadena SER, que nos muestra su día a día y lo apasionante que es su trabajo.
-¿Podrías
explicarnos en qué consiste tu trabajo?
Formo parte del equipo de
personas que se encarga del archivo sonoro de la SER. Somos la Fonoteca de la
radio y por tanto, nuestra labor fundamental es la de conservar sonido, con
criterios informativos y también históricos, con la idea de conformar nuestra
“historia sonora”.
Día a día guardamos debidamente catalogada y transcrita una selección
de la emisión de la SER. Esa selección incluye: los “cortes de voz”
más importantes del día, entrevistas, programas completos, secciones de
programas que tienen una aparición periódica y que constituyen una “colección”,
debates, ruedas de prensa, etc. Incluso, en algún caso excepcional, conservamos
grabaciones de otros medios de comunicación, por su especial trascendencia.
El tratamiento
documental de los audios de Fonoteca debe facilitar la búsqueda y permitir una
rápida recuperación en un medio como la radio. Por eso es parte esencial de
nuestro trabajo la transcripción de
los documentos sonoros, que supone un considerable esfuerzo por parte de los documentalistas.
Es la tarea a la que sin duda dedicamos más tiempo. Pero es inevitable para la
localización de un determinado sonido con eficacia y rapidez, sin necesidad de
tener que escucharse varios hasta localizar el que se necesita. Esta
transcripción es prácticamente literal y en ella incluimos cuidadosamente todas
aquellas palabras clave para poder recuperar, por ejemplo, una determinada
declaración de un personaje.
Además
de todo lo que tiene que ver con la conservación del archivo sonoro, atendemos
las consultas de los redactores, que pueden pedirnos documentación escrita o sonora.
También elaboramos y ponemos en antena lo que denominamos “piezas de
Documentación”. Igualmente tenemos presencia en la página web, que desde
siempre ha incorporado nuestras piezas de apoyo y mucho más en la
actualidad, cuando ya radio y web son
prácticamente uno.
Un ejemplo sería Assange, héroe o villano realizado por Ana.
-¿Realizáis
tareas que no son propiamente documentales?
Entre
nuestras labores hay una más periodística que documental, que además es para
nosotros una seña de identidad: los documentalistas de la SER estamos preparados
para llevar la pieza “hasta el final”. Las “piezas de Documentación” suenan en
antena en las voces de quienes además conservamos el archivo sonoro de la Cadena
SER.
Nos piden y elaboramos perfiles
biográficos, cronologías; resúmenes del año ; otras piezas de apoyo, por
ejemplo para recordar las promesas incumplidas de un político o para recordar
un caso judicial cuando sale la sentencia. También montajes de sonido con
cortes de archivo, sin locución, para que los sonidos tengan más fuerza.
-¿Cómo
se ponen en contacto los usuarios con los documentalistas?
Los redactores normalmente
bajan a pedirnos lo que necesitan. Documentación ya no está integrada en la
redacción, como lo estuvo en sus inicios, ahora estamos una planta más abajo.
También hacen peticiones por correo electrónico. Y muchas veces recurren al
teléfono, sobre todo en caso de urgencia. A pocos minutos de un informativo,
nos echamos a temblar si suena el teléfono, porque la respuesta tendrá que ser
inmediata para llegar a tiempo a antena. A veces todo un reto. Es entonces
cuando te das cuenta de la inmediatez que exige un medio como la radio, donde
la recuperación de unas declaraciones a veces se tiene que hacer en minutos, si
no en segundos.
Y luego, en tono
anecdótico está el “uy, ahora que te veo, necesitaría…”. Y es que es tan
habitual como cómico que alguien nos haga una petición cuando se cruza con
nosotros por un pasillo o en el ascensor o incluso en el baño.
También hay peticiones
externas, por ejemplo de otros medios y hasta de oyentes. Es muy habitual
igualmente que compañeros de otras emisoras de la SER recurran a nosotros.
-¿Cómo
ha evolucionado el trabajo de documentación en la radio con la digitalización
de la media?
Sin duda la digitalización
de la media nos ha aportado dos cosas principalmente: más capacidad de
almacenamiento y mayor rapidez de respuesta a las peticiones que nos hacen.
Actualmente contamos con
grandes servidores para almacenar sonido. Hasta que en 2004 dimos el salto del
soporte físico al digital, guardar las 24 horas de emisión de la SER era
imposible, o al menos muy costoso. Por espacio y por la inversión que hubiera
supuesto comprar miles y miles de cintas. Por tanto, hasta entonces lo que se
conservó en la Fonoteca de la SER fue siempre una selección. No obstante, y
aparte de estas razones prácticas, también hay que recordar que se tardó en
tener conciencia del valor histórico de la emisión. Los programas se lanzaban a
las ondas y se perdían para siempre, sólo quedaban en el recuerdo de los
oyentes.
Y en relación a la rapidez
de respuesta, ahora todo es mucho más inmediato, la velocidad de respuesta es
un valor y no sólo en el mundo de la Documentación. Lanzar un archivo de audio
digital a antena es ya cuestión de segundos. Sin embargo, cuando trabajábamos
con cintas había que ir a por ellas, a veces haciendo verdaderos sprints por
los pasillos, localizar el punto en el que estaban las declaraciones que
buscábamos, etc. De todas formas es algo que no hemos olvidado, puesto que parte
del archivo sonoro de Informativos todavía no se ha digitalizado. En
Documentación seguimos familiarizados con los magnetofones y el rebobinado de
cintas. Es curioso porque ya ha llegado la generación de redactores que no sabe
cómo se reproducen este tipo de soportes físicos: cinta abierta, cassette,
minidisc, dat, etc. Los discos de vinilo en cambio, como han vuelto a ponerse
de moda, ya no son tan desconocidos.
-¿Qué
destacarías de tu trabajo y qué se podría mejorar?
Me encanta mi trabajo
porque es la mezcla perfecta entre mi vocación de “ratón de biblioteca” y mi
pasión por la radio. El contacto con la actualidad me fascina y pensar además
que estoy ayudando a conservar el archivo sonoro de la SER, que sinceramente
considero un tesoro, me hace sentir muy orgullosa. Y aunque la imagen que
habitualmente se tiene del trabajo en un archivo es gris o monótona, ser
documentalista de radio es todo lo contrario, tan dinámico y cambiante como la
propia realidad.
En cuanto a qué podría
mejorar de mi labor, tal vez destacaría en primer lugar la relación con los
usuarios. Es frustrante que todavía haya redactores que para buscar un sonido
recurran antes a Internet que a nosotros. Puedo incluso contar que se ha dado
el caso de quien en la redacción ha sacado de Youtube el audio de la entrada de
Tejero en el Congreso durante el golpe de Estado del 23-F. Hay que recordar en
este punto que la Cadena SER fue la única emisora que
mantuvo abierta su línea microfónica con el hemiciclo. Línea microfónica que
afortunadamente los golpistas nunca descubrieron y que permitió grabar durante
toda la noche lo que pasaba dentro, mientras en antena se emitía un programa en
directo. Se constituyó así un fondo de 30 cintas que es, de hecho, el origen de
nuestra Fonoteca.
El tema de la
transcripción es también algo que tiene que evolucionar. Son muchas horas de
teclado que no podemos dedicar a otro tipo de tareas. Ningún instrumento informático de reconocimiento de
voz ha servido hasta el momento para recuperar con fiabilidad las voces de las
grabaciones, sobre todo porque las características de cada voz humana, la
velocidad mayor o menor de ésta, las circunstancias de grabación, los fondos
sonoros, etc. hacen inevitable la mecanografía, al menos a día de hoy.
Y por último añadiría que
aunque intentamos adelantarnos a las necesidades de la redacción, el día a día
nos come. Preparamos piezas en acontecimientos “previsibles” como Efemérides,
citas electorales, la muerte de algún personaje, la elección de un nuevo Papa,
sentencias judiciales, etc. Pero lo más habitual es que trabajemos “a demanda”,
porque no tenemos capacidad para preparar tanto como nos gustaría.
A continuación introduzco dos preguntas que ha realizado Olga Díaz y me han resultado muy interesantes y que Ana ha respondido amablemente.
-¿Usan para la transcripción algún tesauro?
Sí usamos tesauro pero no para la transcripción. Se asignan los términos del tesauro como un elemento más en la catalogación, un campo más como puede ser el de fecha, personaje, etc... La transcripción es un campo de texto libre en el que copiamos lo que dice el personaje al que estamos transcribiendo y donde los documentalistas añadimos otros términos (por ejemplo sinónimos, porque creemos que los redactores podrían buscar por ese otro término) y donde añadimos también comentarios descriptivos para ayudar a la posterior búsqueda y recuperación. Por ejemplo: “se oyen aplausos”, “de fondo se oye...”, “habla emocionado”, “micro abierto”, “error gramatical”...
-¿Qué SGBD usan?
En cuanto al SGBD que utilizamos , en Documentación trabajamos con dos herramientas. Sus nombres son Redact@ y Enciclomedi@. Redact@ es la herramienta de trabajo que compartimos con la redacción. Aquí escribimos nuestros textos, editamos el audio, recibimos los teletipos de agencias y nos conectamos con las diferentes emisoras para poder compartir contenidos. Enciclomedi@ es la plataforma multimedia que alberga los contenidos de Fonoteca, Discoteca, Archivo Gráfico, Efectos de Sonido, también los denominados “elementos de continuidad”, como las sintonías y los jingles de los programas e informativos, etc… A Enciclomedi@ tienen acceso todos los redactores y pueden recurrir a ella de forma autónoma cuando para su trabajo necesitan un “corte de voz” de archivo, una canción, una foto, o un efecto de sonido, entre otras cosas.
Ana Martínez Concejo
Documentalista Cadena SER
Gracias, muy interesante la documentación en la radio.
ResponderEliminarGracias a ti Olga. Saludos
EliminarDan ganas de trabajar en un centro de documentación de radio o medio parecido, muchas gracias por el artículo y enhorabuena por la entrevista
ResponderEliminarGracias por tus palabras. Saludos
ResponderEliminarGracias, sobre todo, por esto: "Es frustrante que todavía haya redactores que para buscar un sonido recurran antes a Internet que a nosotros. "
ResponderEliminarMe siento muy identificado.
Gracias a ti por tu comentario Chema. Lo que prtenedo con el blog y sobre todo con las entrevistas es conocer los trabajos de otros compañeros y valorar lo que podemos hacer. Saludos
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