Existen multitud de rutas y caminos que se pueden hacer, teniendo como
referencia un libro, un escrito, una lengua, etc. Voy a comenzar por la ruta
literaria "Camino de la Lengua Castellana" y como se
aprecia en el título, habrá más de una parte.
Primero, situémonos en el tiempo y entendamos la evolución de las bibliotecas y
de la escritura: Sobre el 2.000 a.C los sumerios comenzaron a escribir en
tablillas de arcilla con punzones con la denominada escritura cuneiforme.
Después los egipcios realizaron sus documentos con papiro que se fabricaba con
los juncos del Nilo. Posteriormente los griegos y los romanos escribían en la piel
de corderos y cabras, que acabó denominándose pergamino.
Y llegamos al momento que nos interesa: cuando el territorio ocupado por Roma se cristianizó, quienes tenían acceso al conocimiento y a la escritura eran los monjes de los monasterios. Y aquí es donde comenzó lo que hoy denominamos Lengua Castellana.
Y llegamos al momento que nos interesa: cuando el territorio ocupado por Roma se cristianizó, quienes tenían acceso al conocimiento y a la escritura eran los monjes de los monasterios. Y aquí es donde comenzó lo que hoy denominamos Lengua Castellana.
Monasterio de Yuso |
En el Monasterio
de Yuso de San Millán de la Cogolla, provincia de La Rioja, vivían
monjes como en todos los monasterios de la zona no ocupada por los árabes.
Estos monjes, entre sus muchos quehaceres, se dedicaban a copiar los textos
religiosos existentes en latín para que perdurasen en el tiempo. Lo hacían en
una sala denominada scriptorium -escritorio -, en pupitres o mesas con sus
plumas, tintas y pergaminos entre otros utensilios. Aproximadamente en el s.X,
un monje estaba copiando un texto en latín, y por aclararse un poco con la
gramática y el significado de las palabras, escribió en un margen, unas notas
en la lengua coloquial que hablaba el pueblo: el romance = lengua castellana.
Y así, por casualidad, por ser
práctico, se escribió el primer documento existente en castellano.
A esos comentarios, se les denomina
Glosas y Emilianenses, no es porque el Monje se llamara Emiliano, sino porque
el códice denominado Aemilianensis estaba en el Monasterio de San Millán
o Emiliano de la Cogolla. Además este monje, en su traducción añadió
también palabras del vascuence. Así que, ¿Qué tenemos de nuevo? El primer
documento en vasco. Aquí está ese documento escrito tan importante. Las Glosas
son esas líneas justo debajo de la pluma.
Este documento, es el que se conoce
como el primero en lengua castellana, aunque fuera realmente navarro-aragonés.
En 2010 la Real Academia Española determinó que otro documento era anterior a
este, por lo tanto no sería justamente el primero en que se escribiera en
castellano. Las Glosas Emilianenses son conservadas en la Real Academia de la
Historia.
Manuscrito de Gonzalo de Berceo |
En el s.XIII vivió otro monje, que
se convertiría en el primer poeta de la lengua castellana: Gonzalo de Berceo.
Allí escribió la vida de San Millán que pasó a formar parte de la historia
documental de nuestro país y que se conserva en la Real Academia Española.
La Fundación
Camino de la Lengua Castellana quiere difundir y promover la lengua
castellana a través de esta ruta. En su página web, encontramos los distintos
lugares que forman esta ruta, la finalidad de la fundación, publicaciones sobre
el Camino de la Lengua Castellana de todo tipo: turísticas, poéticas,
gastronómicas, didácticas, históricas, informativas.
Además la Fundación realiza distintas actividades y
entre ellas destaca la Exposición Virtual del Camino de la Lengua Castellana.
Si entramos en San Millán de la Cogolla, descubriremos como era el scriptorium
de los monjes, una maqueta del monasterio para conocer sus lugares, más datos
sobre Gonzalo de Berceo, las Glosas y los monasterios de este pueblo riojano.
Además existe un juego para averiguar lo que se ha aprendido de esta ruta.
Por último, quisiera acabar con un
vídeo, que veo que se está convirtiendo en tradición. Para conocer mejor como
vivían estos monjes y entretenerse con una de las mejoras historias de suspense
escritas jamás: En nombre de la rosa de Umberto Eco. Si alguien todavía no
conoce esta novela que se lea primero el libro y después vea la película. La
protagonizan Sean Connery "James Bond", Christian Slater y Ron
Perlman, más conocido por su papel de Hellboy.
Ir a Ruta literaria "Camino de la Lengua Castellana" : Parte II
Muy interesante, Ali! Y te lo dice una filóloga. Un beso.
ResponderEliminarMar
Muchas gracias Mar. Prometo más entradas de este estilo jejjej. Mira la de los archivos que es un homenaje a ti y a otra vallecana.Bsts
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